Viajes
Me dijo un sacerdote anciano:
…el sacerdocio no es para hacer dinero, pero debes procurar por lo menos tener
dinero para tres cosas:
1.- Comer bien.
2.- Vestir bien.
3.- Disfrutar de unas merecidas vacaciones.
He tratado de poner estas tres cosas en práctica y quisiera que muchos tomaran en cuenta este sabio consejo.
Conozco a mucha gente que trabajan y trabajan, pero lamentablemente comen a las carreras y a veces hasta mal; viven tan ocupados que envían a otros para que les compren la ropa o el calzado. Vacaciones? Descanso? Viajar? Para ellos esas palabras suenan a “imposible”
Solemos decir que el tiempo no nos alcanza, en lugar de decir que no hemos aprendido a distribuir bien el tiempo. Si algo es saludable y beneficioso es viajar. Hazlo y verás lo mucho que te enriquecerás tanto física como espiritualmente.
Entiendo que no a todo el mundo le gusta viajar. Hay quienes prefieren otro tipo de actividades. Todo es respetable, por supuesto. Pero son millones de personas las que cada año reservan parte de sus ahorros para viajar, esto quiere decir que es una buena opción.
El primer motivo por el cual la gente elije viajar es el placer y el descanso.
Descansar, es el principal motivo de un viaje. Más que el descanso físico, -estoy pensando en un Crucero,- lo que más descansa en un viaje es nuestra mente.
El cuerpo puede
fatigarse, sobre todo cuando viajamos a Tierra Santa y a Egipto por querer
visitar tantos lugares, pero el descanso de nuestra mente nos hace sentir bien,
frescos y renovados.
Cada año, ofrezco un itinerario de algunos lugares de especial interés. Yo mismo me encargo de todos los arreglos concernientes a transporte aéreo, terrestre o marítimo, de los hoteles, comidas y guías turísticos. Y esto lo hago con el propósito de ayudar a muchas personas, especialmente mayores, a quienes se les dificulta planificar un viaje al exterior.
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